14 de enero de 2009

The Pursuit of Happyness...

En la soledad de una habitación piensas si debes o no debes. Si te sirve o no te sirve. Si debes aceptar o no debes aceptar. Valoras la situación y la importancia del tiempo en la carrera profesional que uno quiere labrar, construir y edificar desde que un día decidiste estudiar lo que estudiaste. Más, si cabe, desde el día que decidiste dedicarte a algo más en concreto -bendita la fecha de esa sana locura, o insana inconsciencia-.

Crees que los pasos que das no son más que pasos que dejas atrás. Te equivocas. El camino que has recorrido varía haciéndote variara tí como persona. Si hubieras mirado atrás te habrías percatado de que bien hubieras recorrido gustoso otro camino, otros caminos. Apuesto a que te lo habrías planteado al menos.

Te encuentras abarcando aquello que quieres pero no aprietas lo suficiente para apuntar, disparar y acertar en el centro de la diana. Por tanto, sigues recorriendo tu camino consciente de que es el correcto, estás orgulloso, pero sabes que es mejorable. Inteligente, te das cuenta de los errores y los subsanas como puedes. Bien, pero ¿tarde?

¿Y ahora qué hago? Ni idea. Apuntas aquí, apuntas allá. Y aciertas, pero sabes que a partir de marzo no hay nada para tí. En principio. Hasta hoy ¿posiblemente? ¿Me enfrento a la lógica? ¿Arriesgo con tal de seguir peleando por un sueño?

Ayer en un descanso del trabajo me puse a mirar en Youtube un fragmento de una película de Will Smith, The Pursuit of Happyness, una de mis favoritas por la actuación de ese gran actor que es para mí el de Philadelphia, y por la sublime, emocionante y sensible banda sonora de Andrea Guerra. Y lo tengo claro. No se por qué. No me preguntéis porque lo he visto más claro que ayer, sólo sé que mañana lo veré más claro aún, ha sido cuestión de tiempo, de días en este caso. Siento la necesidad de seguir formándome en esa pequeña agencia de comunicación. Agradable, sencilla y libre, sobre todo, libre. Allí donde me permiten aspirar a mis sueños con más facilidad, limitándome, quizás, a tener que disponer de un presente más austero por un futuro de felicidad si sigo luchando por aquello en lo que creo.

"If you got a dream, you got to protect it. (...) You want something, go and get it. Period."


No sé si he acertado. Sé que he decidido mirando porque creo en algo, pero todavía no sé en qué exactamente.

4 comentarios:

  1. Enhorabuena por tu lanzamiento. La verdad es que hay que tener valor para empezar un blog, sobretodo para eso, empezarlo. No te falta inspiración, estás constantemente actualizándolo!; otro punto a favor. Frescura, sinceridad y un poco descarado , no ? Buen ejercicio de solidaridad hacerse blogger... con un mix de vanidad (sana).

    (Necesito algo así para combatir la ansiedad y soledad que me caracterizan)

    Tus sablazos me encantan! pero,como no, he encontrado algún que otro fallo XD ÑEEEE.

    ResponderEliminar
  2. Pues serías de gran ayuda si me los dijeras. Porque diciendo que encuentras fallos y no comentándolos... poco poco...

    PD: yo soy más del Ñu que del Ñe...

    ResponderEliminar
  3. Muchas gracias por la parte que nos toca en relación con tu decisión, Javier. Confío en que esos pálpitos que dices sean buenos y, sobre todo, en que nos lleven a un camino juntos que nos enriquezca a todos.

    Y si finalmente no era el camino adecuado, no te comas mucho el coco porque pienso que tienes un perfil y una edad que te permiten darte el lujo de soñar y navegar sin pagar mucho por ello. Me refiero a que cuando tienes 40 años es mucho más arriesgado dar un salto que pueda hacerte difícil volver al punto anterior; si tienes 25, casi todo lo que suceda te hará aprender, incluso si erraste el tiro. Suerte!

    Pablo
    PD: corrige el enlace a youtube ;)

    ResponderEliminar
  4. Corregido. Gracias.

    Seguiremos tratando de informar de lo que nos venga en gana...

    ResponderEliminar