La incompetencia hecha éxito (relativo)

Me voy a animar a hacer un fascicular sobre aquellas personas que, con toda la humildad que el teclado me permita, me parecen incompetentes y algo inútiles, y que a su vez se han hecho un nombre en el campo o área en el que desarrollen su actividad.

Es una máxima de este país. Culebrea. No tienes porque ser el mejor ni el más constante ni el más educado ni el más trabajador. Con pisotear, tener amiguetes y saber "sacar a paseo" los codos puedes hacerte con un buen puesto en una televisión, un partido político e incluso en un equipo de fútbol, el combinado nacional, el periodismo y un concurso de baile. Todo a la vez. ¡Salinas! ¡Jugón!

Todo irá surgiendo, depende de como empiece la mañana. Normalmente tengo un despertar correcto, pero ya todo se pende del carácter que me dejen las memeces y bobadas que escuche a lo largo de la mañana. Hace unas horas casi sufro un colapso escuchando a José Blanco a.k.a. Pepiño, adalid de la sinvergonzonería política y el caradurismo patrio. Gracias Pepiño, me has dado una gran idea. Un día -quizás hoy- empiece con uno, y luego seguiré con el mencionado e ínclito Blanco, JJ Santos y demás Julios Salinas de la vida. Todos unos genios de la poltrona, la colocación y el amiguismo, respectivamente.

Para abrir boca, os voy a enlazar el recurrente "como muestra, un botón", dedicado a Julito... Iglesias no, hombre, que ese si que tiene clase -menos que su difunto padre, claro-. Me refiero a Salinas. Sí, el que amargó a España entera la madrugada del 10 de julio.

Un saludo compañeros...